Hipnosis Y Terapia De Autorregulación

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BREVE HISTORIA DE LA HIPNOSIS

- La mayoría de los autores concuerdan en que fue Franz Anton Mesmer (siglo XVIII), el precursor de la hipnosis moderna, al poner en contacto a sus enfermos con objetos magnetizados.

Sin embargo, las investigaciones demostraron la futilidad científica de sus postulados (magnetismos animal y crisis curativas).

- A pesar de eso, distintos profesionales continuaron desarrollando sus métodos, hasta que Puisêgur lo denominara hipnotismo o sonambulismo artificial (nombre popularizado por Braid).

- Posteriormente, las escuelas de Salpêtrière (Charcot y Janet), y de Nancy (Liébault y Bernheim), enfatizaron el uso de la hipnosis para la investigación en psicopatología y medicina, desarrollando teorías y procedimientos aún vigentes. Además, establecieron una polémica que contribuyó, junto con Wundt y Hull, a la inclusión de la hipnosis, en el ámbito del estudio de la psicología científica.

- Labor de Hadfield y Simmel durante la 1ª Guerra Mundial, en el tratamiento de las neurosis de guerra.

- Trabajo de Matkins, en la 2ª Guerra Mundial.

Con todo eso provocó que la hipnosis comenzara a formar parte de los estudios curriculares de medicina, odontología y psiquiatría en los EEUU.

A medidos del siglo XX, aparecieron sociedades y revistas especializadas.

Aun siendo la hipnosis considerada por la Unesco como perteneciente a la parapsicología, psicólogos como Barber, Hilgard, Spanos y Orne, investigan sobre ella con una metodología experimental "dura" y elaborada.

Actualmente, los procedimientos de inducción hipnótica, forman parte de la mayoría de los manuales de psicoterapia y modificación de la conducta, siendo uno de los procedimientos de mayor difusión entre los profesionales de la salud.

BASES TEÓRICAS DE LA HIPNOSIS: LA POLÉMICA TRANCE VS PROCESOS GENERALES

Hay dificultad para definir lo que es la hipnosis.

Spanos y Barber (1976), prefieren hablar de situación hipnótica. Dicen que alguien está hipnotizado cuando, tras recibir el "procedimiento de inducción hipnótica", la persona:
  1. Aumenta sus respuestas a las sugestiones de catalepsia, analgesia, amnesia, etc.
  2. Informa de experiencias inusuales, pensamiento ilógico, distorsiones de la percepción, etc.
  3. Muestra una apariencia hipnótica: aletargamiento, pasividad y fijeza en el mirar.
  4. Informa de que ha sido hipnotizado.
Distintas teorías pueden clasificarse según la dimensión especificidad/generalidad.

TEORIAS ESPECÍFICAS:

- Son aquellas creadas ex profeso para explicar la hipnosis, asumiendo que es algo único y diferente a otras conductas humanas.

- Adoptan conceptos explicativos que abogan por la existencia de un estado "especial" de conciencia denominado "trance", que se alcanza tras la inducción hipnótica, y que es responsable de la discontinuidad de las conductas del sujeto hipnotizado.

- Teorías de Weitzenhoffer, Shor y Hilgard.

- La teoría de mayor influencia es la teoría disociativa de Hilgard (1977), inspirada en la teoría de disociación de Janet.

Defiende la existencia de subsistemas cognitivos, controlados jerárquicamente por el control central del ego.

La consecución del trance disociaría éstos subsistemas, alterando la pauta de control.

Dos supuestos básicos:
  1. A mayor nivel de trance, mayor disociación.
  2. El nivel máximo de trance alcanzable, varía persona a persona, pero es inmodificable para cada individuo.
TEORÍAS GENERALES:

- No asumen tal singularidad de la hipnosis y adoptan modelos y conceptos de la psicología, medicina, fisiología, etc.

- Rechazan el concepto de trance, por considerar que no es mensurable con criterios independientes, destacando la circularidad explicativa del razonamiento.

- Teorías de Barber, Spanos, Sarbin y Coe.

- Defienden una postura psicosocial o cognitivo comportamental para el entendimiento de las conductas hipnóticas.

- La teoría cognitivo- comportamental es la de mayor repercusión. En ella se retoman ideas y conceptos de la escuela de Nancy, enfatizando las variables contextuales en su interacción con las personales, como determinantes de las conductas hipnóticas.

- Se defiende la entrenabilidad de la susceptibilidad a la hipnosis, ampliando así el rango de personas que pueden beneficiarse de ella. De ésta concepción de la sugestión, surge al terapia de autorregulación.

INDUCCIÓN DE LA HIPNOSIS

Definición de Spanos y Barber: Conjunto de comportamientos, percibidos como involuntarios o automáticos, que aparecen tras la aplicación de un "método de inducción".

COMPORTAMIENTOS TÍPICOS EN LA SITUACIÓN HIPNÓTICA

REACCIONES MOTORAS

Los elementos motores son denominados IDEOMOTORES, porque se asume que los provoca una imagen o idea sugerida.

Movimientos que se provocan: levitación de la mano, caída del brazo, movimientos rotativos de los brazos, movimientos rápidos del globo ocular, etc.

Flexibilidad cérea (los miembros permanecen estáticos en la posición en la que se los deja) o catalepsia (rigidez de alguna extremidad).

REACCIONES SENSORIO-FISIOLÓGICAS

Se denominan IDEOSENSORIALES.

Engloban sensaciones pertenecientes a los 5 sentidos, así como sensaciones propioceptivas (pesadez, flotación).

Algunas respuestas biológicas: salivación, tos, cambios en la tasa cardiaca, anestesie y analgesia (se consideran ideosensoriales por referirse a reacciones psiofisiológicas).

REACCIONES COGNITIVO-PERCEPTIVAS

Se incluyen fenómenos de amnesia como:

- Amnesia total: se olvida de todo lo que ocurrió en un periodo determinado.

- Amnesia parcial: Olvido de una parte de ese periodo.

- Amnesia de fuente: Olvido del origen de la información de un recuerdo.

También se incluye el fenómeno contrario o hipermnesia (aumento de la información que se recuerda).

Alucinaciones positivas (se percibe algo inexistente) y negativas (no se percibe algo inexistente).

A diferencia de los elementos ideosensoriales, las alucinaciones serían más vívidas, y las respuestas ante ellas de mayor intensidad.

Son también elementos cognitivo-perceptivos: la disociación (aislamiento de la persona de su entorno o de una parte del cuerpo del resto), distorsión del tiempo, regresión de edad (mostrar comportamientos pertenecientes a etapas previas), progresión del tiempo (lo contrario).

Esta clasificación aglutina elementos más por su nivel de dificultad que por su cualidad.

La mayoría de las reacciones indicadas, especialmente las motoras, se pueden categorizar como ejercicios de reto o desafío siempre que se inste a resistir el cumplimiento de una sugestión.

También se pueden categorizar las sugestiones en:
  • Hipnóticas: Cuando se dan en la situación hipnótica.
  • Posthipnóticas: Cuando deben cumplirse una vez acabada la hipnosis.
Los elementos hipnóticos o las reacciones a la sugestión se han asociado a niveles de hipnosis:
  • Hipnosis ligera: movimientos rápidos de los ojos, pasividad, pesadez.
  • Hipnosis media: Reacciones motoras de catalepsia, cumplimiento de los retos motores.
  • Hipnosis profunda o sonambúlica: elementos cognitivos, especialmente le reto.
Desde la perspectiva cognitivo-comportamental, esta graduación de la hipnosis es inoportuna, ya que los elementos ideomotores son más fáciles y los cognitivos más difíciles.

Se puede decir que una persona es más susceptible o hipnotizable, cuantos más elementos de las categorías ejecute.

Los métodos de evaluación de la susceptibilidad más aceptados han sido los que han recibido un tto psicométrico.

Los de mayor relevancia: Hilgard, Barber y Spanos (estudios sobre fiabilidad y validez).

Dos fenómenos habituales en la inducción hipnótica:
  1. Homoacción: Disminución de la latencia en el cumplimiento de una sugestión, a medida que la sugestión se repite.
  2. Heteroacción: Reducción de la latencia observada en el cumplimiento de una sugestión determinada, debido al cumplimiento de otras sugestiones diferentes previas.
A medida que avanza la inducción hipnótica, y se repite en el tiempo tal inducción, la homoacción y la heteroacción son más acusadas.

Pueden utilizarse en el tto como evidencia de los avances del cliente en el dominio de los ejercicio hipnóticos.

UN MÉTODO PARA LA INDUCCIÓN DE LA HIPNOSIS

La mayoría de los métodos se basan en fomentar una hiperconcentración de la persona en un objeto, idea o imagen; En generar algún tipo de respuesta ideomotora y/o ideosensorial, y en dar sugerencias de relajación. El uso de la imaginación es determinante y se recurre a ella constantemente.

Se comienza explicando a la persona en qué consiste la hipnosis y eliminando los conceptos erróneos.

Asimismo, se le pide su colaboración.

Se establece algún tipo de señal visual (levantar un dedo) para indicar al terapeuta que debe interrumpir la inducción

Conviene avisar de que se pueden producir sensaciones como mareo, pesadez o flotación, que son "síntomas" de estar siendo hipnotizado.

Indicar que el esfuerzo por cumplir una sugestión automáticamente la bloquea y que, el luchar contra los pensamientos, imágenes o ruidos distractores, dificulta la concentración (deben dejarse "pasar", tomándolos como motivos para relajarse aun más.

Indicar que en la primera sesión, no siempre se logran niveles profundos de hipnosis, pero que, gracias a la homo y heteroacción, con la practica se mejorará.

Se comienza con PRUEBAS DE SUSCEPTIBLIDAD HIPNÓTICA:

  • "Test de Oscilación postural" (Hull): Se coloca a la persona de pie con los pies juntos, los brazos pegados al cuerpo y los ojos cerrados, pidiéndole que procure permanecer relajada. Se le indica que cuando el terapeuta toque su hombro notará como se balancea ("Te balanceas, nota cómo te balanceas"). Después se repite el ejercicio pero la sugestión es de caída hacia atrás ("Nota como te caes"). Si la persona se balancea y cae, pero coloca una pierna para evitar la caída es que es susceptible pero no confía en el terapeuta. Se le pide que siga la sugestión sin poner impedimentos, repitiéndole el ejercicio.
  • La persona tiene que levantar el globo ocular todo lo que pueda y, manteniéndolo en esa posición, bajar los párpados. En ese momento, el terapeuta le pide que abra los ojos. Si el cliente no puede, es que sigue las instrucciones. Si los abre es que no colabora o no entiende.
  • Se le pide que entrelace las manos juntando las palmas. El psicólogo coloca sus manos encima de las del cliente y, presionándolas sin hacerle daño, le indica que las apriete, y mientras le mira fijamente a los ojos, le dice. "Cuando quite mis manos, intentarás separar las tuyas y observarás que no podrás. Cuanto más lo intentes más se pegarán". Si se cumple la sugestión, a los pocos segundos se le indica que ya puede separarlas diciéndole que su reacción es potente y que podrá hipnotizarse con facilidad. Si no se cumple, se le indica que es posible que algunos ejercicios no sean apropiados para su caso.
Es importante dejar patente que la no realización de algún ejercicio entre dentro de lo normal.

En caso de que ninguna de las sugestiones haya funcionado, es mejor optar por otros procedimientos (terapia de autorregulación), y abandonar la hipnosis.

PROCEDIMIENTO:

Se realizan ejercicios ideomotores, como la levitación del brazo.

Ejercicios de reto, que si fallan, se indicará al paciente que es normal y se intentarán otros evitando el reto, pero siguiendo con la misma lógica.

Distintos ejercicios como:
  • Alucinación de sed: "Caminas por una playa en pleno verano, notas tu garganta seca…".
  • Inhibición verbal: "Tu garganta se hace dura, rígida, no puedes hablar, dime tu nombre…".
  • Respuestas posthipnóticas: amnesia parcial ("Tu mente borra el ejercicio nº 2…").
  • Movimiento involuntario asociado a una señal (parpadeo al oír un chasquido).
En general se trata de ir de ejercicios más fáciles (ideomotores) a otro más difíciles (cognitivos de reto) y de dar alguna sugestión posthipnótica.

Si se fallase en alguno, se indica que es normal, pues se están realizando pruebas para conocer cual es más útil, y se afirma el éxito de la inducción, ya que la persona ha mostrado pasividad y relajación.

Si se tiene éxito, se le indica lo profundamente hipnotizado que está, y los beneficios que obtendrá de las sugestiones y de su esfuerzo por cambiar.

Cuando se han realizado algunos ejercicios (según los objetivos), se dice al paciente que va a salir de la hipnosis, introduciendo una sugestión previa que establezca una señal (poner la mano en la frente), para provocar automáticamente, el mismo "estado hipnótico", lo que acortará la próxima inducción.

A continuación se le pide que imagine que camina, cada vez más deprisa, y se le sugiere que está cada vez más activado, pero relajado y despejado, y que, al acabar el conteo de 1 a 5 podrá abrir los ojos y salir de la hipnosis, sintiendo una enormes ganas de trabajar sobre su problema.

Si la persona no quiere salir de la hipnosis, se le deja unos minutos para que la "saboree", repitiéndose entonces el conteo.

Una vez se ha finalizado, la persona debe permanecer sentada unos minutos para evitar que se maree. Esos minutos se aprovechan para comprobar las sugestiones posthipnóticas.

Después se formulan preguntas acerca de las sensaciones sentidas, pensamientos e imágenes, su grado de satisfacción. Cualquier problema se intenta corregir o proponer soluciones para la próxima sesión.

Si el cliente no se muestra colaborador, se desestima la hipnosis como herramienta terapéutica.

VARIACIONES EN LA INDUCCIÓN DE LA HIPNOSIS
  • Técnicas de sugestión indirecta de Barber: Se puede sustituir la fijación de la mirada y la concentración por un dialogo en el que se modula la voz para enfatizar un mensaje camuflado. El terapeuta adopta posiciones, entonaciones y gestos que transmiten sensación de confort, compresión, respeto y paciencia, etc.. mientras se sugieren situaciones que facilitan el cumplimiento de las sugestiones.
  • AUTOHIPNOSIS: Es adecuado como complemento pero no como firma única, para que la persona pueda practicar fuera de la sesión terapéutica, y ,mejorar la generalización de estímulos (a la vida cotidiana).
Spiegel y Spiegel propusieron una forma rápida:

Verbalizando un conteo de 1 a 3, se le pide a la persona que:
  1. Levante los globos oculares tanto como pueda, que baje los párpados (pero no los ojos), e inspire profundamente.
  2. Que exhale al tiempo que relaja el globo ocular.
  3. Que experimente una sensación de flotación.
En ese momento se le pide que se concentre en esa sensación y permita que un brazo levite, apoyándose en la imaginación.

El ejercicio debe realizarse al menos 10 veces/día, para lo cual se le da al sujeto una regla mnemotécnica que le ayude a recordar los pasos.

El ejercicio dura 1 minuto, aunque con la práctica es cuestión de segundos, por lo que se puede realizar en cualquier situación.

En público conviene camuflarlo (los ojos se enrolan con los párpados cerrados, y la levitación se realiza llevando la mano a la frente).

CRITERIOS DE APLICACIÓN DE LA HIPNOSIS CLÍNICA

Las sugestiones "hipnóticas" pueden ser utilizadas casi para cualquier tipo de problema, pero no con cualquier tipo de persona. No presenta contraindicaciones por peligros inherentes a la técnica.

No sería apropiado hipnotizar a una persona que reúna alguna de las siguientes características:
  • Clientes de muy corta edad (menores de 8-9 años).
  • Sujetos psicológicamente mermados en sus capacidades atencionales o para seguir instrucciones.
  • Personas con un rechazo intenso hacia la hipnosis y la sugestión, pues no colaborarían o abandonarían el tto.
  • Personas poco sugestionables.
  • Personas que deseen ser hipnotizados para experimentar sensaciones únicas Y extraordinarias (quedarían defraudados), o para viajar a otras vidas pasadas o futuras.
  • Personas que deseen ser hipnotizadas bajo el supuesto de que su cambio de comportamiento será automático, sin implicar esfuerzo. En éste caso, conviene comenzar con una reestructuración cognitiva, antes de aplicar la hipnosis.
EVALUACIÓN CRÍTICA DE LA HIPNOSIS CLÍNICA

Problema destacado de la hipnosis: Escaso apoyo empírico a su eficacia terapéutica.

Es difícil evaluar lo que aporta a los ttos psicológicos, ya que la mayoría de los autores sólo publican estudios de caso, sin controlar las variables extrañas.

Los estudios que utilizan diseños de grupo, adolecen de una falta casi absoluta de exposiciones detalladas sobre la forma de la inducción de la hipnosis y los ejercicios realizados.

Además, en pocas ocasiones se evalúa el rol exclusivo de la hipnosis, ya que suele utilizarse junto a otros procedimientos (exposición en vivo, reestructuración cognitiva, solución de problemas, técnicas de automanejo, etc.).

La hipnosis es sumamente útil:
  • Como técnica para inducir relajación subjetiva profunda.
  • Para provocar fenómenos que motiven a la persona a trabajar en su problema.
  • Problemas relacionados con el dolor.
  • Preparación a intervenciones quirúrgicas o exploraciones médicas aversivas.
Dificultad importante: Dificultad de comunicación con el cliente mientras está hipnotizado
  • Disminuye la precisión y la inmediatez de la evaluación de las reacciones del cliente ante las sugestiones
  • Aumenta el riego de que no las ejecute o que falle la inducción.
Además, el terapeuta nunca está seguro de que su rol de experto se vea confirmado.

Este tipo de dificultades se superan con la terapia de autorregulación, como alternativa más dinámica y más fructífera de intervención.

BASES TEÓRICAS DE LA TERAPIA DE AUTORREGULACIÓN

La terapia de autorregulación surge como una alternativa a la hipnosis tradicional, inspirándose en los procedimientos diseñados para incrementar la susceptibilidad hipnótica, elaborados desde la perspectiva cognitivo-comportamental.

Se fundamenta en el uso terapéutico del fenómeno "recuerdo sensorial" (constructo también enfatizado por Kroger y Fezler).

Se divide en 3 fases:
  1. Se realizan ejercicios de recuerdo sensorial.
  2. El sujeto experimenta repetidamente determinadas sensaciones físicas, como respuesta a ciertas imágenes o autosugerencias.
  3. El paciente está altamente receptivo a cualquier tipo de sugestiones.

¿Por qué ocurre esto?:

Hipótesis: Las asociaciones repetidas producirían una activación cortical generalizada (investigaciones sobre neurosis experimentales: respuestas condicionadas repetidas provocaban "sobrecarga excitatoria").

Además, procedimientos que inducen alta activación, incrementan la susceptibilidad hipnótica y la influencia social.

La autorregulación maneja de forma importante la motivación del paciente, así como las expectativas y atribuciones.

DESCRIPCIÓN DEL PROCEDIMIENTO

FASE 1:

Se expone al paciente el fundamento de la autorregulación, y se realizan varios ejercicios de recuerdo sensorial.

Explicación de lo que es el recuerdo sensorial.
  • Es importante que comprenda cómo éste proceso ocurre en su cerebro de forma habitual, continua, automática y al margen de su propia voluntad.
  • Se le hace ver lo interesante que resultaría controlar y utilizar el recuerdo sensorial en su propio beneficio.
  • Así, se empieza a motivar al paciente en cuanto a u participación en la terapia.
  • Se le dan algunas recomendaciones importantes: Que se muestre motivado, que adopte una actitud positiva hacia las tareas, que preste un alto grado de atención, la importancia de la absorción en una tarea, para evitar las distracciones y mejorar el rendimiento.
Después, se realiza el 1º ejercicio de recuerdo sensorial:
  • Se le pide al paciente que introduzca su mano derecha en un recipiente de agua enfriada con hielo, y que describa las sensaciones que esta percibiendo. Se le pueden sugerir algunas: "Puede que note frío en la palma de la mano, entumecimiento, acartonamiento, hormigueo o tal vez rigidez".
  • Se le pide que retenga esas sensaciones en su memoria mientras saca la ano del recipiente.
  • Después, vuelve a introducir la mano, volviendo a percibir las sensaciones anteriores, pero, deberá asociar esas sensaciones con imágenes o pensamientos que le ayuden posteriormente a reproducirlas, sin necesidad del estímulo real (imaginarse que tiene la mano introducida en la nieve, pensar el "frío", aparear pares de estímulos como "frío-mano acartonada").
  • Una vez que la asociación está realizada, el terapeuta le indica que puede sacar la mano del recipiente y secarla con un paño. A continuación, retira el recipiente y le pide al paciente que estire el brazo con la mano hacia abajo, y que, con la ayuda de las imágenes o pensamientos elegidos, reproduzca las sensaciones, a la vez que enfatiza algunas recomendaciones.
  • Cuando el paciente comienza a notar algo, se lo comunica al terapeuta, quien refuerza cualquier logro del paciente. Generalmente nota que la mano adquiere cierta rigidez.
  • Cuando el terapeuta considera que la reproducción sensorial es satisfactoria, le pide al paciente que no interrumpa las sensaciones sin más, sino que elija una señal para ello (se tarta de ejercicios de "disciplina mental"). El paciente se da la señal y la mano vuelve a la normalidad.
A partir de aquí, el terapeuta puede proponer varios ejercicios más de recuerdo sensorial.

En la Escala de autorregulación se proponen 4 ejercicios:
  1. Sensación de rigidez con el recipiente de agua fría.
  2. Sensación de peso en la mano con un libro pesado.
  3. Olor a ceniza con una recipiente de ceniza.
  4. Salivación y sabor ácido con zumo de limón.
La cumplimentación de la escala aporta datos predictivos de éxito terapéutico.

En los ejercicios de peso y salivación, se le pide a la persona que asocie las sensaciones a la voz del terapeuta.

FASE 2:

Experimentación de determinadas sensaciones en respuesta a imágenes o sugerencias.

En ésta fase, las sensaciones de rigidez en la mano y de olor a ceniza, son las sensaciones que se reproducirán repetidamente.
  • Se le pide al paciente que reproduzca nuevamente las sensaciones de rigidez, utilizando las imágenes asociadas.
  • Una vez lo ha conseguido, y antes de darse la señal para interrumpirlas, el terapeuta propone una nueva asociación (por ejemplo cuando el paciente toque el pomo de la puerta, la mano se volverá fría y rígida).
  • Cuando el paciente señala que la asociación está realizada, el terapeuta le pide que interrumpa las sensaciones con la señal elegida.
  • Después de esto, el terapeuta puede proponer asociaciones similares con otras sensaciones, o continuar con el ejercicio anterior, en cuyo caso, tras una pausa, propone al paciente que se acerque a la puerta y toque el pomo, insistiéndole en que no fuerce las sensaciones y que deje que las "cosas ocurran". Cuando el paciente nota la rigidez el terapeuta le retira la mano de la puerta, y le hace ver que ésta se ha quedado rígida e inmóvil. El terapeuta puede proponer una nueva asociación.
A partir de ahí, el terapeuta irá enfatizando que las asociaciones se producen cada vez más rápido y de forma más potente. Hasta que, al final de una serie de ejercicios (entre 3-6), se producen sólo a partir de las sugerencias directas del terapeuta.

El terapeuta transmite al paciente la idea de que es importante confiar en que las sensaciones se reproducirán después de una determinada asociación, y que esa mayor rapidez y facilidad de la asociación, es debida a un creciente aumento de la activación cortical ("Su cerebro está cada vez más activado, cada vez más receptivo a las sugerencias que yo le propongo". "Está a punto de tomar el control del mecanismo cerebral del recuerdo sensorial").

FASE 3:

Comienza con las siguientes frases: "Ahora su cerebro está muy activado. Muy receptivo. Cualquier idea que esté en su mente tenderá a cumplirse".

Se llama también FASE DE GENERALIZACIÓN, ya que es posible manejar cualquier tipo de sugestiones, tanto sugestiones hipnóticas tradicionales (ideomotoras, de reto, alucinaciones, regresión de edad, etc.) como sugestiones terapéuticas (sugestiones de fortalecimiento del ego, de reducción de ansiedad, motivacionales, etc.).

Es posible entrar directamente en el tto del problema motivo de la consulta, y hacerlo mediante: técnicas de role playing (para entrenamiento en asertividad), condicionamiento encubierto (para reducción de tabaco y alcohol), reestructuración cognitiva o cualquier aproximación terapéutica.

Ventajas de utilizar éstos procedimientos de terapia en el contexto de la técnica de autorregulación:

Rapidez, comodidad, agrado por la terapia y reducción considerable de los aspectos aversivos de muchas técnicas terapéuticas.

Presenta unos procedimientos genuinos que se basan en el empleo de la sugestión directa, y en la potenciación al máximo de los "aspectos inespecíficos" de las terapias: motivación, atribuciones, expectativas, etc.

En ésta fase se establece también una señal denominada "señal de hipnotización", mediante la cual el paciente estará en condiciones, en sesiones terapéuticas futuras, de recibir rápidamente las sugestiones sin necesidad de repetir todo el procedimiento.

VARIACIONES DEL PROCEDIMIENTO

Las variaciones de la técnica, permiten adaptar la terapia de autorregulación a las diferencias individuales.
  • Autorregulación fisiológica: Añade el empleo de un aparato de biofeedback EMG. Dirigido especialmente a pacientes escépticos a los ttos mentales, hipocondríacos, con conducta de enfermedad y los hospitalizados.
  • Autorregulación motivacional: Para pacientes que rechazan abiertamente la hipnosis, o para sujetos poco sugestionables. Se realizan ejercicios que aumentan la autoeficacia percibida y la consecución de metas, maneja la sugestión de forma que resulta aceptada y asimilada por éste tipo de pacientes.
CRITERIOS DE APLICACIÓN

Los procedimientos de autorregulación pueden llevar los beneficios de las sugestiones terapéuticas, aun mayor número y variedad de personas, que los procedimientos de inducción hipnótica tradicionales.

Sin embargo, no todos los sujetos responden igual de bien o rápido.

Criterios de aplicación:
  • Nivel de sensibilidad hipnótica medida a través de escalas estandarizadas de susceptibilidad hipnótica.
  • Más específico: Resultados obtenidos en la Escala de autorregulación.
En definitiva, la terapia de autorregulación es aceptada por una buena parte de los pacientes, y preferida a técnicas más tradicionales de inducción hipnótica. Es aplicable a una amplia gama de trastornos y alteraciones.

EVALUACIÓN CRÍTICA

La terapia de autorregulación es una terapia joven, que cuenta con una considerable experiencia clínica, y cuya investigación experimental está aumentando considerablemente.

Se trata de una terapia breve, potente, agradable y cómoda para el paciente y que elimina los aspectos aversivos de otro tipo de procedimientos (los sujetos que abandonan el tabaco con los procedimientos de autorregulación, lo hacen con comodidad, sin ansiedad ni aumento de apetito, y con una sensación aumentada de autoeficacia).

Se trata además de una terapia muy flexible que se adapta fácilmente a las diferencias y preferencias individuales, y a los distintos tipos de trastornos.
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