El Papel del Yo en el Recuerdo

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Introducción

Un símbolo denso es aquel que esta ligado a su historia de adquisición, por lo que su significado es estrictamente personal.

Fue Glenberg quien propuso el término corporeización, para acentuar el hecho de que el significado de un concepto viene a ser esencialmente el conjunto de interacciones posibles con el objeto referente, sin olvidar que tales interacciones son de un individuo concreto, con una historia concreta de interacciones anteriores.

Para Glenberg el hecho de que tanto la percepción como la memoria se definan en términos de las interacciones potenciales de los individuos con los objetos explica la íntima relación que se establece entre la informaciónrmación procedente del medio y la producida por el propio sujeto. La combinación de ambas informaciónrmaciones tiene siempre como núcleo de referencia al individuo.

Las percepciones son captaciones de las propiedades proyectables del medio sobre el individuo, mientras que la memoria son las propiedades de la interacción del individuo con el medio que no son proyectables y que están condicionadas por la historia de interacciones.

Glenberg y cols. han demostrado el supuesto de la corporeización como base del significado de frases y sentencias. Así, han demostrado la existencia de un efecto “CAS” (compatibilidad acción-sentencia), que consistía en que los tiempos de reacción eran menores cuando la acción del sujeto (la respuesta que tenia que dar a una frase) se dirigía hacia el propio sujeto (pulsar un botón mas cercano que otro), por lo que se dedujo que el sujeto hacia una mini simulación de la acción que se le presentaba.

Debemos distinguir entre.
  • Yo como objeto de memoria: referencia a los recuerdos autobiográficos. El relato que hace uno halos demás o a si mismo de su propia vida.
  • Yo como herramienta: alude al individuo como polo que condiciona tanto el contenido mismo de la memoria, como la organización de las influencias del pasado sobre el comportamiento actual.

El Yo como Herramienta

Dentro del yo como herramienta, veremos diversos fenómenos relacionados con la memoria, los cuales están relacionados con el yo, pero en ellos no se hace mención explicita del sujeto como un elemento presente en el contenido mental recordado, a pesar de ello, dicho contenido mental se configura teniendo al yo como un polo fundamental de organización de la información.

Mi espacio

Lo primero señalar que los psicólogos de la percepción suelen hablar de “coordenadas espaciotópicas” cuando hacen referencia a la ubicación de los objetos con independencia de la ubicación o punto de vista del observador y de la modalidad sensorial a través de la cual este obtiene los datos necesarios sobre el espacio.

Pero, ¿en que medida incide mi ubicación espacial en la captación de los sucesos que ocurren a mi alrededor? Cuando recuerdo el espacio en el que estado ¿puedo recuperar “mi espacio” con independencia del punto de vista que tuve de él?

De las investigaciones que se han realizado, se ha concluido que nuestra concepción del espacio se describe en función de tres ejes principales:
  • Eje direccional: en este eje los objetos se sitúan delante o detrás del protagonista.
  • Eje vertical: en este eje los objetos se sitúan arriba o abajo del protagonista.
  • Eje transversal: en este eje los objetos se sitúan a la izquierda o derecha del protagonista.
Pero estos tres ejes no tienen el mismo peso y además, el peso relativo de cada uno depende de la posición del cuerpo del observador. Así pues, podemos concluir que hay una clara diferencia entre una descripción psicológica del espacio propio y una descripción euclídea. Las coordenadas del espacio temporal definen una estructura dinámica y dependiente del contexto.

La investigación de Franklin y Tversky concluyo que:
  • Cuando el individuo está en posición vertical, es precisamente ese eje el dominante, seguido del direccional. El eje transversal parece el menos efectivo como referente para la recuperación de la posición de los objetos del espacio personal. Los datos muestran una cierta asimetría direccional: se recuperan antes (son mas accesibles) los objetos situados en el espacio anterior que los del espacio posterior.
  • Cuando los observadores están reclinados respecto a la escena, la aparente jerarquía entre los ejes cambia. Ahora el dominante es el direccional, cuya efectividad como referente de localización anteroposterior no parece afectada por el cambio de posición del observador respecto al eje de gravedad terrestre. Los otros ejes pierden poder de referencia.
  • El espacio psicológico personal parece discontinuo cuando se representa en coordenadas euclídeas, más próximo a la idea de espacio definido en una métrica categórica. Puede ayudar a entender la diferencia saber que Franklin y Tversky aluden al espacio al que hace referencia su investigación como "espacio concebido”, por contraposición al “espacio percibido”, del cual quizá el mejor referente sea el espacio euclídeo continuo.
Los autores justifican este distinto peso de los ejes y su variación mediante la “teoría de los armazones personales”, la cual se basa en el distinto valor funcional que tienen las diferentes regiones espaciales para el desarrollo de la actividad de los individuos y para la comunicación con sus congéneres.

Cuando el individuo está de pie, su eje corporal coincide con el eje de gravedad y ello provoca que la mayoría de los objetivos y de los organismos presenten asimetrías en esta dimensión, y sea la asimetría vertical de los objetos la que menos cambios experimente por la navegación de los individuos

Bryant, Tversky y Franklin demostraron que, para resolver los problemas de ubicación que les plantea una tarea, los sujetos utilizan un modelo espacial construido y no una mera recuperación de datos. Pero estos autores distinguieron entre dos tipos de puntos de referencia que el sujeto podía tomar a la hora de construir el modelo espacial:
  • Si el punto de referencia coincide con el propio sujeto, el espacio construido se califica de egocéntrico.
  • Si el punto de vista es externo al sujeto, el modelo situacional es alocéntrico.
Tenemos que señalar que en los modelos alocéntricos la asimetría antero-posterior (aquella por la que se son mas accesibles los sujetos situados delante que detrás), desaparece. Esto nos puede ayudar a saber que modelo se esta utilizando (alocéntrico o egocéntrico) cuando el texto no contenga referencias acerca del punto de vista. Normalmente se usa el modelo alocéntrico, los sujetos en casos de indefinición tienden a adoptar la posición del prota o incluso de un objeto situado en el centro de la escena.

Mi cara

Hoy ya sabemos que la propia expresión facial de un sujeto puede influir en la definición que este hace de sus emociones. Sin embargo, ¿puede la configuración de la actividad facial de un sujeto influir en su evaluación de otra persona? → Según diversas investigaciones la respuesta es sí:
  • Cuando los sujetos hacen evaluaciones de las características psicológicas de otros sujetos, dichas evaluaciones son más negativas si el sujeto las hace mordiendo una toalla que si las hace poniendo un lápiz entre los dientes (como si sonriese). Esto puede deberse a la sensación de familiaridad derivada de la facilidad de procesamiento del estimulo de prueba que experimenta el sujeto, puesto que esa facilidad de procesamiento no es analítica.
  • La expresión facial tb altera la sensación de familiaridad: los sujetos evalúan como menos famosos a otros sujetos, si les mandan hacer la evaluación contrayendo el entrecejo, con respecto a si se la mandan hacer con el entrecejo relajado o con otra parte del cuerpo en tensión.

Mi punto de vista anterior

Si nos acordamos del sesgo retrospectivo, recordaremos que significaba que los individuos tendemos a acentuar la relación causa – efecto ente dos acontecimientos una vez ya que conocemos las consecuencias.

También recordaremos que este sesgo parece disminuir cuando pedimos a los sujetos que busquen razones por las que se podría haber llegado a un resultado distinto, ya que así aumenta la relevancia de los motivos por los que se podían haberse producido otras consecuencias.

Sin embargo, según la investigación de Sanna y cols., el simple hecho de señalar motivos de un desarrollo alternativo no garantiza la protección contra el olvido. Estos autores pidieron dividieron a los sujetos en 4 grupos.
  • Un grupo de control al que no se le decía cual era el resultado.
  • Otro grupo al que si se le decía el resultado
  • Otro grupo al que se le decía el resultado y se le pedía que encontrase 2 razones para que se pudiera haber producido otro resultado distinto.
  • Otro grupo al que se le decía el resultado y se le pedía que encontrase 10 razones para que se pudiera haber producido otro resultado distinto.
Los resultados fueron que el grupo al que si se le decía el resultado y no tenia que dar ninguna razón, tuvo el sesgo retrospectivo. En el grupo que tenia que dar 2 razones en contra, disminuyo un poco el sesgo retrospectivo. Y en el grupo que tenía que dar 10 razones, en vez de disminuir mas el sesgo, este aumento considerablemente.



Este hecho puede explicarse así: cuando la experiencia subjetiva de buscar argumentos contra lo que se sabe que ocurrió resulta fácil, las estimaciones de que ocurriera lo contrario aumentan, con lo que el sesgo retrospectivo se corrige. Cuando resulta relativamente difícil, dicho sesgo se ve potenciado.

Otro experimento posterior, realizado y para aclarar estos resultados, introdujo una variante con respecto al anterior, ahora los sujetos también deben dar razones por las que los resultados se produjeron de esa manera (2 razones y 10 razones congruentes con el resultado).

En este experimento no hubo grupo de control propiamente dicho (grupo al que no se le dijo el resultado, grupo con condición de predicción prospectiva), sino que el que figura en la tabla como control es el que no tuvo que dar ninguna razón sobre nada. Los resultados del experimento fueron estos:


Vemos que, como cabía esperar, la búsqueda de 2 resultados congruentes provoca un aumento en el sesgo retrospectivo. Sin embargo, la búsqueda de 10 razones congruentes hace a los sujetos creer que no habrían sido capaces de predecir dicho resultado, fenómeno que es contrario al sesgo retrospectivo.

Esto se explica también desde la perspectiva de la dificultad de tener que encontrar 10 razones congruentes con los resultados. Así, la relación causal entre los antecedentes y sus consecuencias se ve fuertemente alterada por algo tan ajeno a la lógica intrínseca de la historia, como es la mayor o menor dificultad que experimenta quien la esta tratando de comprender y aprender. Así, no se tiene en cuenta la dificultad de los argumentos, sino la experiencia subjetiva de dificultad para encontrarlos. El sujeto infiere la viabilidad de los argumentos a partir de su propia experiencia subjetiva y esto puede ser totalmente arbitrario.

Esto ha sido corroborado en otro experimento de Sanna y cols. (2002), en el que había los siguientes grupos:
  • Grupo de control, con predicción prospectiva.
  • Grupo que conocía los resultados pero que no tenia que dar ningún motivo sobre el desenlace ocurrido o uno alternativo.
  • Grupo que tenia que fruncir el ceño al hacer sus predicciones. A la mitad de este grupo se le pidió que dieran 5 razones congruentes con el resultado y a la otra mitad incongruentes.
  • Grupo que no tenía que fruncir el ceño. A la mitad de este grupo se le pidió que dieran 5 razones congruentes con el resultado y a la otra mitad incongruentes.
Los resultados fueron estos:


Vemos que en el grupo que no tenia que dar razones se produjo el sesgo retrospectivo. También vemos que el efecto congruencia/incongruencia de los argumentos se vio afectado por la tensión muscular: fruncir el entrecejo mientras se buscan razones congruentes disminuyo el sesgo retrospectivo mientras que lo aumento cuando las razones debían ser incongruentes. En el grupo relajado no produjo efecto la congruencia.

La conclusión es que parece que el sesgo retrospectivo no es una simple consecuencia de actualizar de manera racional el modelo previamente construido en función del nuevo conocimiento del resultado. La modificación del modelo mental de una historia depende de datos tan ajenos a la historia misma como la dificultad percibida (ya sea por la búsqueda de numerosas razones o por el feedback facial).

Esto es una demostración muy clara de la estrecha relación que hay en cualquier tarea de memoria entre la reacción del sistema a las claves contextuales (internas y externas) y los procesos mas genuinamente constructivos de la recuperación.

Mi estado de ánimo

El experimento más representativo para estudiar la posible influencia de los estados de ánimo en la memoria es el siguiente:

Procedimiento:
El experimento se realiza en dos sesiones separadas con un intervalo de 2 días:
  1. Primera sesión: sesión (de codificación): Se asignaban los sujetos aleatoriamente a uno de 2 grupos, según el estado emocional al que era inducido (alegre o triste).
  2. Segunda sesión: sesión (de recuperación): La mitad de los sujetos que habían pasado cada condición de codificación era asignada a una de las dos condicione de recuperación (alegre o triste).
Sesión de codificación Sesión de recuperación
Alegre Triste
Alegre Igual Diferente
Triste Diferente Igual

En la Sesión de codificación:
Debían memorizar una lista de 32 palabras ordenadas al azar, cada una presentada una sola vez y en uno de los dos formatos: audición o generación:
  1. Audición: El experimentador leía el nombre de su categoría, un asociado fuerte y la palabra que debía a prender. Ej.: Metales preciosos, plata, ORO.
  2. Generación: Las palabras debían adivinarse ante el contexto que ofrecía el investigador en forma de categoría, asociado fuerte y letra inicial. Ej.: metales preciosos, plata, O......
En la Sesión de recuperación:
  • Prueba de recuerdo libre de las 32 palabras en 5 min.
  • Prueba de reconocimiento: El experimentador leía las 32 palabras más 32 nuevas mezcladas al azar y el sujeto debía decir si la palabra se correspondía o no con una de la sesión de codificación, en cualquier modalidad.
Se esperaba que el rendimiento de los sujetos se deteriorara cuando no coincidiera el estado emocional de la codificación y de la recuperación. Y que este efecto solo debía manifestarse en el recuerdo de las palabras generadas, ya que en el reconocimiento la lectura por parte del experimentador ya era considerada como una clave suficiente para anular dicho efecto. También se consideraba que la mayor o menor similitud entre los estados emocionales de ambas sesiones es irrelevante en la prueba de recuerdo cuando el material de estudio fue de origen externo (presentado por el experimentador).

Resultados:



Prueba de recuerdo:
  • Efecto generación: las palabras generadas se recuerdan mejor que las oídas.
  • Deterioro en el recuerdo: se produce cuando el estado emocional era diferente.
Prueba de reconocimiento:
  • No se aprecia el efecto negativo del cambio del humor
El problema de la investigación de los estados emocionales en el laboratorio es la validez ecológica, son muy difíciles de replicar, porque en el laboratorio las variaciones emocionales son de un rango mas bien reducido.

Eich ha llegado a proponer que en ciertas condiciones, los potenciales perjuicios para el recuerdo de cambios de lugar o contextos externos, como cuando se aprende algo en una habituación que deben recordarse en otra, podrían explicarse completamente por cambios de humor o de estado emocional asociados con los cambios de lugar, mas que por el cambio de lugar propiamente dicho.

La demostración mas clara de la asociación entre el cambio de lugar y el cambio de estado emocional se obtuvo en el siguiente procedimiento:

Procedimiento:
  • Los sujetos generaron recuerdos autobiográficos en un jardín japonés e intentaron recordarlos dos días después en el mismo jardín o en una habitación pequeña y mal iluminada
  • Se les indujo estados de ánimo positivos o negativos con la técnica musical continua
  • Este diseño tiene dos VVII: cambio de lugar y cambio de estado emocional que configuran cuatro condiciones experimentales
Resultados:
Lugar de codificación y recuperación RECUERDO
Estados de ánimo inducidos en las dos sesiones
SIMILARIDAD
Estados de ánimo inducidos en las dos sesiones
Igual Diferente Igual Diferente
Igual 52 44 5.75 4.00
Diferente 59 46 6.33 3.42

Vemos que la variable relevante es el cambio en el estado emocional, el cambio de lugar no es apenas relevante. El recuerdo y la estimación de similaridad de estado emocional presentaron valores superiores cuando el estado de ánimo inducido coincida en ambas sesiones (dándose con o sin cambio de contexto)

Eich (1995) interpreta estos resultados de acuerdo con la hipótesis de la mediación del humor: El recuerdo dependiente del lugar (contexto físico) es un caso especial (y bastante sutil) del recuerdo dependiente del humor. Cuando aparece el efecto de contexto ambiental (se recuerda mejor una información allí donde se aprende) el factor mas importante es el estado emocional del sujeto asociado con los distintos lugares

Según Smith (1995), En realidad es el contexto mental (todo lo que ronda por la cabeza en el momento de la adquisición) y no el medioambiental, el que es responsable de ganancias o pérdidas del recuerdo. En cualquier caso, lo que es indudable es el rango especial que ocupa en la memoria la información acerca del yo.

El Yo como Objeto de Memoria

Dentro del “yo como objeto de memoria”, veremos diversas manifestaciones de la memoria en las cuales el yo aparece como objeto. El material de recuerdo es el propio individuo.

Recuerdos autobiográficos

Autobiografía es el relato de la historia de un individuo construido por el mismo. Veamos tres observaciones sobre esta definición:
  1. Las referencias al pasado que hace una persona suelen ser fragmentarias y orientadas a satisfacer el interés del momento en que se hace la rememoración. La mayoría de las personas no suelen hacer un relato exhaustivo y lineal en el tiempo de su vida pasada.
  2. El protagonista del relato es el propio individuo. por su coincidencia con el narrador, su punto de vista es absolutamente peculiar y en cierto sentido privilegiado. Sin embargo, la subjetividad es una fuente de tergiversación que impone sus condiciones.
  3. La narración autobiográfica no se hace con el fin de maximizar la fidelidad con la historia de la vida, sino con el fin de justificar algún estado de cosas pasado, presente o futuro.

Partonomia y taxonomia de los recuerdos autobiográficos

Conway y Pleydell-Pearce han definido los recuerdos autobiográficos como una construcción mental dinámica transitoria elaborada a partir de un conjunto de conocimientos. En esta construcción, los relatos no son continuos, sino que están segmentados en partes, gracias a sucesos que actúan como “marcadores”.

Según estos autores, los recuerdos autobiográficos pueden clasificarse en tres niveles:
  1. Periodos vitales: son recuerdos que se organizan en torno a un tema que agrupa un conjunto de sucesos generales o específicos. Son recuerdos que pertenecen a una determinada etapa de la vida. Ej.: “cuando estudie en la universidad”, “mientras estuve en Irlanda”… Aquí es el tema lo que actúa como clave de recuperación y como guía de la generación estratégica de nuevas claves para la obtención de más recuerdos. Distintos periodos vitales pueden estar total o parcialmente solapados en el tiempo. Los periodos vitales pueden estar delimitados por marcadores bien definidos (ej.: se puede tomar como marcador el día que ingrese en la universidad), pero no siempre es así (ej: se pueden tomar como marcador los días previos en que estuve preparando el viaje).
  2. Sucesos generales: son recuerdos de acontecimientos relacionados generalmente con la consecución de un fin o meta, cuyo logro o fracaso el individuo entiende que ha repercutido de manera determinante en el devenir posterior de su historia. El momento de materialización del logro o fracaso suele ir acompañado de recuerdos muy vividos.
  3. Sucesos específicos: se caracterizan por su riqueza y grano fino de sus contenidos. por ello, son menos maleables y más susceptibles de aparecer automáticamente en respuesta a cualquier clave de recuperación que esté relacionada con ellos, especialmente si es un olor.
Conway ha propuesto que los sucesos generales deben considerarse el nivel básico de los 3, puesto que son los que presentan un mejor balance entre la cantidad y el valor funcional de la información obtenida y comunicada y el esfuerzo de procesamiento para construirlo y comunicarlo.

Los recuerdos autobiográficos tb se construyen mediante el juego combinado de la generación estratégica de claves, las recuperaciones automáticas y las inferencias. Lo que convierte en distinto a estos recuerdos es su función: dotar de consistencia diacrónica al yo.

Consistencia diacrónica del yo

La función esencial de la construcción de recuerdos autobiográficos persigue organizar la actividad del individuo en, al menos, tres aspectos:
  1. La construcción de un modelo mental de si mismo como individuo con ciertas habilidades, limitaciones y deseos, relativamente estables en el tiempo.
  2. La construcción de un relato que contiene las razones que justifican la continuidad de mi pasado con mi presente. Es decir, el recuerdo autobiográfico añade a los contenidos relaciones causales orientadas a justificar la estabilidad del yo. El razonamiento autobiográfico es una narración coherente, en 4 dimensiones:
    • Coherencia temporal
    • Coherencia del concepto de biografía: nos permite distinguir que sucesos son los relevantes y cuales los secundarios
    • Coherencia causal: se refiere a la concepción del yo como alguien con características psicológicas relativamente estables, a partir de las cuales es posible explicar las acciones emprendidas en el pasado y predecir las del futuro. También se refiere a la capacidad de explicar las discontinuidades personales.
    • Coherencia temática.
    Con todas ellas, el relato alcanza la consistencia necesaria para contar los episodios con el mismo contenido independientemente de las veces que se haga.
  3. La definición de una organización de metas a medio y largo plazo. Los objetivos de protagonistas de una historia constituyen una de las dimensiones básicas de la narración.
Sobre la influencia del entorno social en el recuerdo autobiográfico, hemos de decir que, según Pasupathi, al respecto hay dos principios que influyen en este recuerdo autobiográfico:
  1. Principio de coconstrucción: el interlocutor contribuye en el recuerdo del hablante, pues este ultimo selecciona sucesos autobiográficos para lograr unos objetivos en uno oyentes concretos. A su vez, estos oyentes discrepan en algunas cosas, completan frases, refuerzan con entusiasmo una buena historia, muestran aburrimiento…
  2. Principio de consistencia: contra la presión que los interlocutores ejercen para configurar nuestros recuerdos de un modo determinado, existe una norma social tacita, según la cual el relato autobiográfico ha de ser consistente, es decir, debe contener esencialmente los mismos elementos, cuantas veces se repita el mismo episodio.
La interacción social no es la única fuente de modificación del relato autobiográfico, la imaginación también puede alterar los recuerdos autobiográficos. Probablemente la persona que mas trabaja modificando un relato autobiográfico sea su protagonista o constructor.

Según Hermans, el “yo dialógico” es una fuente permanente de actualización, consolidación o modificación de los recuerdos, que se construye gracias a la existencia de un “yo polifacético”: un yo que, por analogía con otros, puede adoptar diferentes posiciones respecto a un tema. Así, si tengo un “yo”, un “otro yo” y un guión de relaciones que permita la interacción entre ambos, tengo un esquema relacional básico (igual que en las relaciones interpersonales), y la actualización de información, y aparición de información nueva, por ese “dialogo” es inevitable.

La amnesia infantil

El fenómeno conocido como amnesia infantil se refiere al hecho de que los adultos difícilmente recordamos episodios previos a la edad de 3-4 años (salvo el nacimiento de un hermano o la hospitalización propia).

Existen 2 puntos de vista sobre este olvido:
  • Inaccesibilidad: la información está almacenada pero no es posible recuperarla. Según estrategias hipnóticas, una reinstauración contextual puede permitir la recuperación de la información.
  • Problemas de almacenamiento: según esta teoría durante este primer periodo de la vida no es posible almacenar información de forma duradera. Sin embargo, sabemos que los niños de 3 años pueden recuperar información de hace mucho tiempo, lo cual es contradictorio con esto.
Según Howe y Courage, la amnesia infantil no es un problema de memoria, sino que este fenómeno se explica por la especificidad de la codificación. Un niño no tiene una concepción de si mismo como la que tiene un adulto, y el peso del yo en nuestras estrategias de recuperación de adulto es tal que la recuperación de acontecimientos puede considerarse imposible si no fueron codificados en coordenadas similares. Ej.: si codifiqué el juego de sartenes como instrumentos para hacer ruido, de poco servirá que me pregunten por la batería de cocina.

Según Sincock y Marlene, un niño que experimente acontecimientos cuando aun no tiene recursos lingüísticos suficientes, solo podrá recordar esos acontecimientos en código o formato no verbal, una vez adquiridos dichos recursos. Esta es una hipótesis de la especificidad de la codificación: si la adquisición de los componentes del lenguaje necesarios para describir un episodio se produce con posterioridad a este, el recuerdo de dicho episodio no puede ser verbal, porque su codificación no lo fue. Veamos un experimento ilustrativo de esto, de los citados autores.

Simcock y Hayne (2002): Mágica máquina de encoger, que usan niños de 27m.

Procedimiento:
Primera sesión experimental: a la casa del bebé le enseñaban a usar la máquina:
  • 1ª acción: Accionaban la palanca de arranque para activar el invento.
  • 2ª acción: Cogía un juguete (1 oso de peluche).
  • 3ª acción: introducían el juguete por una abertura superior.
  •  4ª acción: Daban 1 giro a la manivela lateral, La máquina emitía 1 sonido durante 4s.
  • 5ª acción: Mostraban al niño como, abriendo la compuerta lateral se obtenía el oso nuevamente pero más pequeño.
Se repetía con 7 juguetes distintos
Se pasaron pruebas de vocabulario (comprensión y producción verbal) y los padres cumplimentaron un cuestionario en el que especificaban si los términos que en él aparecían formaban parte del vocabulario del niño (girar, manivela, etc.)
Segunda sesión, 6m o 1 año después
  • Mejora en los test de habilidades verbales.
  • No apareció ninguna palabra crítica cuando se les pidió que les contaran sobre lo que hicieron en la visita anterior.
  • Después del relato libre y preguntas concretas (prueba de recuerdo) sobre la informaciónrmación que no pudieron dar, se les presentaron foros con algunos objetos que habían sido parte de la visita anterior y otras fotos distractoras (prueba de reconocimiento)Reconocieron los objetos que eran de la primera visita.
  • Cuando se ponía en marcha la Máquina Mágica de Encoger , reproducían muchos de las acciones asociadas a los términos críticos.
La interpretación que se hace de esto es que los niños no recuerdan verbalmente lo que no codificaron verbalmente, aun cuando en el momento del recuerdo posean la competencia lingüística necesaria y un recuerdo de acciones suficiente. Sin embargo, hay que ser cautos con esta interpretación, porque la única garantía que había en el experimento de que los niños poseían la competencia lingüística de producción (o incluso comprensión) de los términos necesarios era sus padres decían que lo hacía.

Comprobación de realidad

Cuando el recuerdo de un episodio nos viene a la cabeza, muchas veces sabemos el momento y el lugar donde recibimos esa información, pero en otras ocasiones no lo sabemos. Esto es lo que estudia la “supervisión del origen”: que es el conjunto de procesos implicados en hacer atribuciones sobre los orígenes de los recuerdos, conocimientos y creencias.

Jonson y cols. han propuesto que los individuos pueden plantearse dudas con respecto a los juicios de supervisión de origen de 3 maneras:
  • Origen externo-externo: problema de elegir el origen, entre diversas fuentes externas al individuo.
  • Origen externo-interno: problema de elegir si el origen es una fuente interna (contenidos mentales del propio individuo que no son públicamente observables).
  • Origen interno-interno: elegir entre algo pensado o imaginado por el individuo.
Nos referiremos al problema externo-interno, es decir, cuando se debe elegir si el origen de la información es algo que yo he imaginado o es algo que realmente ha ocurrido. Ej: ¿lo dije o lo pensé? ¿lo oí o lo imagine?

Según Jonson y Raye, lo que me permite distinguir si realmente ocurrió, de si solo lo he pensado, o imaginado, es que la fuente real proporciona mucha más riqueza que la fuente mental, en sus detalles sensoriales al individuo.

Por tanto, en nuestro caso, que estamos analizando el yo como objeto de memoria, el tipo de supervisión de origen que nos interesa es la comprobación de realidad, ya que en ella, el sujeto se sitúa como objeto directo del episodio que tratamos de recordar. Veamos un experimento al respecto.

Johnson, Foley y Leach (1988)

Procedimientos:
Se les dijo a los sujetos que era una prueba de imaginación. Antes de empezar los ayudantes A y B leyeron un texto para que los sujetos se familiarizasen con las voces.
Presentaron listas de palabras en 3 procedimientos diferentes.
  • Grupo 1: El experimentador en algún momento de la lista pedía a su ayudante A decir 1 palabra (Juana di bellota ) Con el resto de palabras el sujeto debía imaginarse así mismo diciendo la palabra bellota.
  • Grupo 2: El procedimiento era similar, pero entonces debía imaginar la voz del ayudante A (imagínate a Juana diciendo bellota ) unas palabras eran repetidas por el ayudante A y otras eran imaginadas por el sujeto en la voz del ayudante.
  • Grupo 3: Las palabras imaginadas debían serlo en la voz de otro ayudante B (imagínate a Asunción diciendo bellota).
Prueba:
  • Al acabar la lista se conversó durante 3 min. y luego se les pasó 1 prueba de reconocimiento por sorpresa.
  • El experimentador leyó una lista de palabras a 1 ritmo de 5 seg./palabra, en la que habían palabras nuevas y antiguas.
  • El sujeto debía decir si era nuevas o no y si había sido oída por el ayudante A o imaginada (como dicha por A, por B o por el propio sujeto, según el grupo que había sido asignado).
Resultados:

El siguiente gráfico muestra el porcentaje de palabras repetidas por A (y oídas por los sujetos), que los sujetos reconocieron correctamente como oídas (barra azul) o pensaron incorrectamente que habían sido imaginadas (barra verde) en los 3 grupos.


  • Vemos un excelente rendimiento de los tres grupos. Mostraron buena supervisión de realidad en estas palabras, recordando en la mayoría de ellas que habían sido pronunciadas por el ayudante A.
  • Sin embargo, el siguiente gráfico muestra los porcentajes de palabras imaginadas reconocidas correctamente como imaginadas (barra verde) y erróneamente como oídas (barra azul).


Vemos que los sujetos que imaginaban las palabras en su propia voz rara vez las recordaban como pronunciadas por la ayudante. Sin embargo, los que imaginaron estas palabras en la voz del ayudante, en muchas ocasiones creyeron que habían sido pronunciadas, cometiendo un error de atribución de origen externo a un episodio interno (error de supervisión de la realidad).

Lo que sucedía era que cuando los sujetos oyen la palabra pronunciada por A, rara vez la recuerdan imaginada por A, pero muchas de las veces que la imaginaban en A, la recordaban como pronunciada por A. Cabria pensar que este error es debido al esfuerzo adicional de tener que imaginar la palabra pronunciada por otra persona, una tarea que podría ser distractora. Sin embargo, el hecho de que esto no ocurra en el grupo que tuvo que imaginar la palabra en la voz del ayudante B, lo descarta.

Conclusiones:
Es más fácil confundir lo imaginado con lo percibido más que lo percibido con lo imaginado. La información percibida se recuerda mejor como información externa que la información imaginada como información interna. Esto es debido a que la información externa conserva mayor riqueza de detalles sensoriales, que proporcionan garantías de su valor de realidad externa.

Hay que decir que cuando se carece de tales detalles perceptivos se tiende a realizar una atribución de origen interno (de un contenido de carácter externo). Es el caso del fenómeno conocido como criptomnesia o plagio no intencional, donde se plagia de manera no intencionada la producción artística de otro.
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